martes, 4 de noviembre de 2014

10 FORMAS DE CAPTURAR EL RITMO EN UNA FOTOGRAFÍA

¿Eres de aquellas personas que son incapaces de poner un pie tras otro, de seguir una coreografía o moverte al son de cualquier música?, ¿Eres incapaz de distinguir el ritmo de una canción, del traqueteo de un tren o del canto de un pájaro? Pues eres lo que se conoce como una persona arrítmica. Pero no te preocupes, primero porque no estás solo y segundo porque, por suerte, éste artículo hablará de ritmo, pero no del que sentimos a través del oído sino el que contemplamos a través de la vista.

¿Qué es el ritmo visual?

El ritmo es un elemento más de la composición fotográfica y se basa en la disposición de formas en un plano. Cuando estas formas se organizan de forma repetida y ordenada y de manera constante o variable, estamos introduciendo ritmo en la imagen.

¿Para qué lo utilizo?

El ritmo en composición es un recurso visual que se utiliza para imprimir dinamismo a la imagen, creando sensación de movimiento y ayudándonos a componer los elementos de la fotografía.
  • Armonía: El ritmo puede ser armónico en cuanto no queda interrumpido; la secuencia se repite sin nada que la “perturbe”.
  • Tensión: El ritmo genera tensión visual al romper la secuencia formal.

¿Qué tipos de ritmo hay? 

Los tipos de ritmo más comúnmente utilizados son:

Uniforme

El ritmo uniforme se origina a través de formas repetidas regularmente. Dependiendo del espacio libre entre unas y otras, obtendremos un ritmo más lento (mucho espacio vacío entre las formas) o más rápido (menos espacio entre ellas)

Alterno

El ritmo alterno, como su propio nombre indica, alterna dos o más formas diferentes de forma regular. Por ejemplo:

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Ritmo alterno

Creciente o decreciente

Repetición de las formas de la imagen agrandándose o empequeñeciéndose progresivamente.

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Ritmo creciente
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Ritmo decreciente







Ritmo Radial

Es el ritmo que parte de un punto central y se expande progresivamente a partir de él.
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Ritmo radial

Ritmo simétrico

A partir de un eje imaginario, sitúa la misma forma a ambos lados de la imagen.

Formas de capturar el ritmo en una fotografía

1. A través del color

La combinación de diferentes tonos o colores también crea ritmo en una imagen. Puedes crear secuencias alternas, romper el ritmo, alternarlo, etcétera.
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Conseguir ritmo a través del color

2. A través de las líneas

Como sabes, las líneas son otro elemento importante de la composición fotográfica. A través de su repetición o alternancia, puedes crear diferentes ritmos.

3. Ritmo en la naturaleza

En la naturaleza encontrarás ritmo en todo lo que veas, puesto que ésta es esencialmente formal, llena de curvas y patrones. Hay ritmo en los nervios de una hoja, en una caracola de mar, en los pétalos de las flores, en las alas de las mariposas o en los troncos repetidos de los árboles.
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Ritmo en los elementos naturales

4. Ritmo en la arquitectura

Las ciudades están llenas de arquitectura, y la arquitectura de ritmo. Pasos de cebra, fachadas, columnas, bancos, piernas caminantes, etcétera. Hay millones de elementos rítmicos a tu alrededor, sólo es cuestión de buscar un poco :-)

5. Romper el ritmo

Pocas veces una buena imagen se sostiene únicamente por un punto; es decir, siempre necesitamos la combinación de varios elementos en la imagen: la luz, el encuadre, el centro de interés, el color o la ausencia de él, etcétera. Las formas rítmicas no son una excepción, y suelen necesitar de algo que las acompañe para potenciar la imagen.  Una imagen basada únicamente en rito (por ejemplo unas escaleras) puede finalmente carecer de interés, por eso es importante saberlo con antelación para poder buscar o esperar a encontrar elementos de tensión que rompan el ritmo y generen interés en la imagen.
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Rompe el ritmo para evitar monotonía

6. El elemento humano

Una imagen basada simplemente en la repetición de formas, lo que antes hemos llamado “armónica” puesto que no hay nada que interrumpa su devenir, corre el riesgo de llegar a ser una imagen aburrida o carente de interés. No siempre el ritmo tiene que ser un fin en sí mismo. Es una ayuda compositiva más para aportar interés a la imagen. Añadir un componente humano a tus imágenes te ayudará por un lado a romper el ritmo, y por otro te aportará un centro de interés claro en la imagen.

7. Luces y sombras

Jugar con la oposición, con el juego de luces y sombras, también puede proporcionarte patrones rítmicos muy interesantes para la composición de tu imagen.
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Luces y sombras para crear ritmo

8. Ritmo y otras normas de composición básicas

Obtener imágenes basadas en el ritmo no siempre es fácil. Ya hemos comentado lo fácil que es caer en imágenes “demasiado” formales carentes de interés o aburridas. Por ello es importante que te apoyes en otras normas de composición básicas. Por ejemplo, has decidido fotografiar las líneas horizontales de un paso de cebra, allí tienes ritmo pero no demasiado interés, de repente pasa alguien con unos zapatos rojos muy adecuados para romper el ritmo de tu imagen. ¿Por qué no aprovechas el instante y los colocas por ejemplo en algún tercio? (Regla de los tercios), ¿Y si le dejas espacio hacia el lugar al que se dirige? (ley de la mirada).

9. ¿Llenar el encuadre?

Si llenas el encuadre de formas rítmicas, la sensación que transmitirás es la de que la sucesión de ritmo continúa más allá de la fotografía; la impresión de que hay continuidad fuera del marco. Si por el contrario decides dejar espacio libre, la imagen acaba, tiene un principio y un final.

10. Practica

Sí, como siempre en este arte, cuanto más practiques, cuantas más veces busques ritmo, lo encuentres, lo encuadres y lo fotografíes, más facilidad tendrás para explotar sus posibilidades. Las primeras veces es posible que tus composiciones se vean maravillosas en el momento y terribles en la pantalla de tu ordenador. Seguramente faltó algo o te olvidaste de combinarlo con otras técnicas de composición para respaldar tu imagen. La próxima vez lo tendrás en cuenta y volverás a fallar en algo que hasta ese momento no se te había ocurrido. La tercera, la cuarta, o la quinta vez sabrás exactamente qué quieres y cómo lo quieres y cuando la veas en el ordenador no te sorprenderás porque esperabas exactamente eso :-) . Eso sólo se consigue con práctica. Bueno, con práctica, entusiasmo, perseverancia y paciencia ;-)

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